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Los colores y aromas de la primavera se lucen más en el Circuito Chico, el paseo natural de Bariloche que deslumbra con sus paisajes y se puede hacer en auto particular, con excursión organizada, en bicicleta y hasta caminando.
La mayoría de los turistas que visitan Bariloche dedican unas horas al Circuito Chico. Es el paseo inicial para quienes quieran conocer los encantos naturales de Bariloche en este trayecto de unos 60 kilómetros, contabilizando la salida en el centro de la ciudad.
Antes de sumergirse en la ruta del circuito se puede acceder a la coqueta capilla San Eduardo y al hotel Llao Llao, ambas construcciones de fines de los años 30, ideadas por Alejandro Bustillo. También el puerto Pañuelo, desde donde parten las excursiones lacustres, es un atractivo.
Una vez en el camino los lugares para detenerse son muchos pero –para los que hacen el recorrido por su cuenta– no se debe dejar de ingresar al Bosque Municipal Llao Llao, que tiene un sendero señalizado en medio de un bosque de encanto y desde donde incluso se accede a la costa del lago Moreno. De la mano de enfrente, a la derecha de la ruta, se abre un camino para llegar a Villa Tacul, otro sector del bosque con placenteras playas que dan al Nahuel Huapi. Ideal para tomarse un descanso, mate de por medio.
La continuidad de la ruta deriva en una nueva parada, en un misterioso Puente Romano edificado en piedra en 1937 sobre un viejo camino. Tomó la inspiración de los puentes del siglo II. El sendero demanda una caminata corta.
El mismo camino en dirección contraria, por unos 20 minutos de caminata, conduce al lago Escondido, un pequeño espejo de agua que en verano tiene temperaturas cálidas.
Una vez que se deja atrás la península Llao Llao el camino cruza el puente del arroyo Angostura y parte desde allí un desvío para la zona de bahía López, que también cuenta con una amplia playa y posibilidad de bajada de lanchas. El circuito sigue hacia el Punto Panorámico, que ofrece una excelente vista al lago Moreno y la península Llao Llao.
Unos kilómetros más adelantes se encuentra el desvío para acceder a Colonia Suiza, que además del entorno mágico tiene una feria artesanal los miércoles y domingos donde se puede degustar el curanto (carnes y verduras cocidas en un hoyo en la tierra).

Precios y recorridos
$ 375 es el valor de la excursión organizada con guía y transporte.
3 a 4 horas puede demandar el recorrido con la agencia de viajes. Por cuenta propia hasta todo el día.